FUENTE : LA PRENSA AUSTRAL
Con un 50 por ciento de su casco bajo el agua y con una inclinación de 60 grados a estribor aproximadamente se encuentra el transbordador Amadeo I en el sector del canal Kirke (50 kilómetros al suroeste de Puerto Natales), tras tocar fondo y sufrir una seria avería en su estructura, que provocó que se inundaran sus bodegas y su capitán debiera tomar la decisión de varar la nave con el fin de salvar a la tripulación y pasajeros.
La nave había zarpado ayer a las 7,05 horas desde el muelle de la Empresa Portuaria Austral de Puerto Natales con 594 metros lineales de carga, 17 pasajeros y 28 tripulantes, al mando del capitán Eleodoro Barría García.
Alrededor de las 9 de la mañana, cuando cruzaba el canal del Kirke, la nave tocó fondo (chocó contra las rocas) sufriendo el casco una fisura a la altura de la cuaderna 128 de estribor (costado derecho) cuya dimensión al cierre de esta edición se desconocía. Sin embargo el agua comenzó rápidamente a ingresar a la zona de bodegas. A raíz de ello el capitán del ferry debió retroceder la nave para sacarla del lugar y enfilar hacia la costa donde la varó. Mientras realizaba esta maniobra los pasajeros observaron cómo el buque comenzaba peligrosamente a inclinarse hacia el costado derecho, quedando en un primer momento con una inclinación de 30 grados.
En esos momentos llegó hasta el lugar la lancha a motor Ayohara que se encontraba en las inmediaciones, a la que se sumó a las 10,30 horas la Lancha de Servicio y Rescate (LSR) 4422 Arcángel de la Armada, al mando del capitán de Puerto de Natales, capitán de corbeta, Cristián Ortega.
Al ver la emergencia se instalaron escaleras de gato (escaleras de madera con tensores de cuerda) por un costado del transbordador, desde donde se evacuaron a 17 pasajeros y 9 tripulantes, quienes llegaron a Puerto Natales a bordo de la patrullera de la Armada a las 14 horas.
En el interior del buque zozobrado quedaron el capitán de la nave y 18 tripulantes realizando las faenas de achique, quienes a las 17 horas de la tarde de ayer también fueron evacuados al ser imposible contener el ingreso del agua a la zona de bodegas y la sala de máquinas y por consiguiente ser peligroso para su integridad física su permanencia al interior de la nave. En esos momentos el buque presentaba una inclinación de 60 grados y un 50 por ciento de su casco se encontraba sumergido en las frías aguas del canal Kirke. La proa de la nave se encuentra apoyada en la playa por lo que se descartaba su hundimiento.
Libre tránsito por el canal Kirke
A la llegada a Puerto Natales de los pasajeros y la tripulación a bordo de la patrullera Arcángel de la Armada, el capitán de Puerto, Cristián Ortega, indicó que de acuerdo a lo informado por el capitán del transbordador no estarían comprometidos los estanques de combustible, por lo que en esos momentos se descartaba un derrame de hidrocarburos. Pese a lo anterior, en horas de la tarde, se llevaría al lugar del siniestro elementos de contención a bordo de la patrullera Puerto Natales.
La inundación de los compartimentos fue tan veloz que no se pudo determinar la envergadura de la rajadura que se produjo en el casco, por lo que al término de la jornada se desconocía su dimensión.
Con respecto a los animales que transportaba la nave, el oficial expresó que “se está analizando la situación. Vamos a ver cuál es el mejor curso de acción para minimizar al máximo el daño para la carga”.
Consultado sobre la situación del canal Kirke como vía de desplazamiento marítimo, dijo que “no hay ningún impedimento porque el canal no se encuentra bloqueado”.
Ayer en el lugar no había viento, siendo favorables las condiciones para trabajar.
De inmediato se inició por parte de la autoridad marítima una investigación para tratar de establecer las causas del accidente y evitar que una emergencia similar se repita en el futuro.
Buque de reemplazo
El gerente de operaciones de Navimag, Jorge Biott, informó que el viernes zarpará desde Puerto Montt una nave para reemplazar al Amadeo I. Podría ser el transbordador Edén o Evangelistas.
Pese al accidente, se indicó no se alterará el itinerario normal de abastecimiento de la zona, ya que la nave que vendrá de Puerto Montt a Ultima Esperanza lo haría con carga. Además se contempla el servicio regular a la localidad de Puerto Edén.
Con respecto a la carga del Amadeo I, dijo que existen seguros comprometidos, tanto por parte de los transportistas como de la empresa Naviera (versión de la empresa se amplía en la página 5).
5 años cubriendo la ruta
En enero del año 2009 el transbordador Amadeo I se incorporó a la flota de embarcaciones de empresa Naviera Magallanes que prestan servicio en la zona sur del país.
La adquisición de la nave demandó una inversión de 7 millones de dólares (4 mil 18 millones de pesos).
El Amadeo I mide 132,5 metros de largo y 19 metros de ancho, pudiendo desarrollar una velocidad promedio de 14,5 nudos. Cuenta con tres cubiertas conectadas con sistemas de ascensores de 45 toneladas de capacidad.
El ferry, construido en 1976, tiene capacidad para transportar 4.500 toneladas de carga y un máximo de 52 pasajeros.
La nave había zarpado ayer a las 7,05 horas desde el muelle de la Empresa Portuaria Austral de Puerto Natales con 594 metros lineales de carga, 17 pasajeros y 28 tripulantes, al mando del capitán Eleodoro Barría García.
Alrededor de las 9 de la mañana, cuando cruzaba el canal del Kirke, la nave tocó fondo (chocó contra las rocas) sufriendo el casco una fisura a la altura de la cuaderna 128 de estribor (costado derecho) cuya dimensión al cierre de esta edición se desconocía. Sin embargo el agua comenzó rápidamente a ingresar a la zona de bodegas. A raíz de ello el capitán del ferry debió retroceder la nave para sacarla del lugar y enfilar hacia la costa donde la varó. Mientras realizaba esta maniobra los pasajeros observaron cómo el buque comenzaba peligrosamente a inclinarse hacia el costado derecho, quedando en un primer momento con una inclinación de 30 grados.
En esos momentos llegó hasta el lugar la lancha a motor Ayohara que se encontraba en las inmediaciones, a la que se sumó a las 10,30 horas la Lancha de Servicio y Rescate (LSR) 4422 Arcángel de la Armada, al mando del capitán de Puerto de Natales, capitán de corbeta, Cristián Ortega.
Al ver la emergencia se instalaron escaleras de gato (escaleras de madera con tensores de cuerda) por un costado del transbordador, desde donde se evacuaron a 17 pasajeros y 9 tripulantes, quienes llegaron a Puerto Natales a bordo de la patrullera de la Armada a las 14 horas.
En el interior del buque zozobrado quedaron el capitán de la nave y 18 tripulantes realizando las faenas de achique, quienes a las 17 horas de la tarde de ayer también fueron evacuados al ser imposible contener el ingreso del agua a la zona de bodegas y la sala de máquinas y por consiguiente ser peligroso para su integridad física su permanencia al interior de la nave. En esos momentos el buque presentaba una inclinación de 60 grados y un 50 por ciento de su casco se encontraba sumergido en las frías aguas del canal Kirke. La proa de la nave se encuentra apoyada en la playa por lo que se descartaba su hundimiento.
Libre tránsito por el canal Kirke
A la llegada a Puerto Natales de los pasajeros y la tripulación a bordo de la patrullera Arcángel de la Armada, el capitán de Puerto, Cristián Ortega, indicó que de acuerdo a lo informado por el capitán del transbordador no estarían comprometidos los estanques de combustible, por lo que en esos momentos se descartaba un derrame de hidrocarburos. Pese a lo anterior, en horas de la tarde, se llevaría al lugar del siniestro elementos de contención a bordo de la patrullera Puerto Natales.
La inundación de los compartimentos fue tan veloz que no se pudo determinar la envergadura de la rajadura que se produjo en el casco, por lo que al término de la jornada se desconocía su dimensión.
Con respecto a los animales que transportaba la nave, el oficial expresó que “se está analizando la situación. Vamos a ver cuál es el mejor curso de acción para minimizar al máximo el daño para la carga”.
Consultado sobre la situación del canal Kirke como vía de desplazamiento marítimo, dijo que “no hay ningún impedimento porque el canal no se encuentra bloqueado”.
Ayer en el lugar no había viento, siendo favorables las condiciones para trabajar.
De inmediato se inició por parte de la autoridad marítima una investigación para tratar de establecer las causas del accidente y evitar que una emergencia similar se repita en el futuro.
Buque de reemplazo
El gerente de operaciones de Navimag, Jorge Biott, informó que el viernes zarpará desde Puerto Montt una nave para reemplazar al Amadeo I. Podría ser el transbordador Edén o Evangelistas.
Pese al accidente, se indicó no se alterará el itinerario normal de abastecimiento de la zona, ya que la nave que vendrá de Puerto Montt a Ultima Esperanza lo haría con carga. Además se contempla el servicio regular a la localidad de Puerto Edén.
Con respecto a la carga del Amadeo I, dijo que existen seguros comprometidos, tanto por parte de los transportistas como de la empresa Naviera (versión de la empresa se amplía en la página 5).
5 años cubriendo la ruta
En enero del año 2009 el transbordador Amadeo I se incorporó a la flota de embarcaciones de empresa Naviera Magallanes que prestan servicio en la zona sur del país.
La adquisición de la nave demandó una inversión de 7 millones de dólares (4 mil 18 millones de pesos).
El Amadeo I mide 132,5 metros de largo y 19 metros de ancho, pudiendo desarrollar una velocidad promedio de 14,5 nudos. Cuenta con tres cubiertas conectadas con sistemas de ascensores de 45 toneladas de capacidad.
El ferry, construido en 1976, tiene capacidad para transportar 4.500 toneladas de carga y un máximo de 52 pasajeros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario