FUENTE : EL PINGUINO
Significará una inversión de alrededor de 25 millones de dólares y el recinto que empleará altos estandares tecnológicos que permitará una gran producción, pero también un trabajo amigable con el medio ambiente.
La provincia de Última Esperanza atrajo las miradas de los inversionistas del rubro de la acuicultura, así hace más de 15 años la empresa Salmones Magallanes inició sus operaciones en los canales cercanos a Puerto Natales, actualmente cuenta con seis centros de cultivos para engorda una piscicultura y un centro de reproductores, más una planta de proceso que arrienda para faenar los salmones y hacer productos de valor agregado.
Los niveles de producción que tiene esta empresa son excelentes, actualmente están produciendo 12 mil toneladas brutas de salmón al año, dando trabajo directo a 160 personas semidirecto a otras 300 personas, y de forma indirecta a otras 100 prestadoras de servicio. En total, entre directos e indirectos, la empresa provee empleo a aproximadamente 560 personas en la provincia.
Nuevo proyecto
Ahora el desafío es construir una instalación de piscicultura de recirculación, la que instalará a 23 km de Puerto Natales y se edificará con la más moderna tecnología existente en el mundo para producir de la manera más sustentable, casi sin impacto en el medio ambiente. Este recinto tendrá como objetivo el lugar que albergue a los salmones en su primera etapa de vida, periodo en que habitan en aguas dulces hasta cuando alcanzan un tamaño apropiado (100 gramos) para ser trasladados al mar.
Alrededor de 25 millones de dólares se invertirán en dicho recinto, esta alta cifra se debe a que la empresa empleará una avanzada tecnología que garantizará ocupar menos del 1% de la cantidad empleada en la piscicultura tradicional, es decir, más de 200 veces menos. Asimismo se utilizarán bacterias para purificar y limpiar el agua, la que también será desinfectada por radiación ultravioleta.
Las proyecciones son amplias, porque permitirá producir el 100% de los smolt (salmones juveniles) que se necesitan en la región, se estima que la piscicultura producirá 8 millones de peces lo que se traducirá en más de 30 mil toneladas de producción en los próximos años. El impacto del nuevo proyecto en términos de empleo, “va mucho más allá del trabajo directo para las personas que desempeñarán labores en la piscicultura, ya que por medio de él se consolidará la empresa en la zona, permitiendo su crecimiento pausado pero sostenido y además los servicios que requerirá la nueva instalación hace que esa cifra sea multiplicativa, debido a este proyecto, por lo menos se crearán 500 empleos más en forma directa e indirecta”, comentó el gerente de cultivo de Salmones Magallanes, Oscar Garay.
Alta conciencia medioambiental
Entre la política de la empresa acuícola, la conciencia medioambiental juega un rol primordial, la que se manifiesta en toda su estrategia productiva. Los centros en el mar tienen cámaras y sensores que monitorean la alimentación para no perder alimento e impactar lo menos posible al fondo marino. “Esta visión y forma de trabajar, implica una mayor inversión, pero que a la larga se compensa plenamente con el mínimo impacto ambiental que tienen nuestras actividades y la protección del entorno, que de deteriorarse también nos afecta a nosotros directamente. Eso se refleja en la inversión de la piscicultura, que de ser una piscicultura tradicional podría haber salido un 30% menos”, comentó Garay.
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