Amenazó a doctor

 

FUENTE    :   EL PINGUINO

 

 

Detenido quedó un paciente, quien indignado por no recibir una licencia médica amenazó de muerte al médico tratante, asegurando tener un arma de fuego. Aseguró que su acción tuvo que ver con la desesperación de no perder su trabajo.
El incidente se registró pasadas las 10 horas de ayer, cuando Belisario Pérez Vargas, de 58 años, llegó hasta las dependencias del Instituto de Seguridad del Trabajo (IST), en Avenida Bulnes Nº 01643, en Punta Arenas.
En el lugar, el paciente solicitó al médico de salud ocupacional Cristián Cabrera Ortiz, que le extendiera una licencia médica por las lesiones que mantenía. De acuerdo a los antecedentes, la negativa por parte del facultativo en emitir dicha licencia,irritó al paciente, quien tras increpar al profesional le dijo que lo mataría con la pistola que aseguraba, portaba en un bolso.
En medio de gritos, el doctor logró salir del lugar para solicitar ayuda y la concurrencia de Carabineros, quienes al constituirse en el lugar procedieron a la detención del agresor y de paso descartaron la existencia de un arma de fuego.
El capitán Álvaro Muñoz, subcomisario de Punta Arenas, explicó que “personal del Plan Cuadrante de Seguridad Preventiva llegó en horas de la mañana hasta el interior del Instituto de Seguridad del Trabajador, donde una persona habría amenazado de muerte a un médico. En el lugar, la víctima denunció que momentos antes había llegado una persona de 58 años, quien solicitó ser atendido por unas lesiones antiguas que mantenía. Luego de ser atendido fue dado de alta. Esta acción fue la que molestó al paciente, quien obligó al médico a otorgarle una licencia médica, ante lo cual el doctor se negó. En esas circunstancias señaló que portaba un arma de fuego oculta al interior de un bolso y que lo mataría. Esto fue lo que originó un amplio operativo policial”.
Al lugar concurrió personal del Grupo de Operaciones Especiales (GOPE), la Sección de Investigación Policial (SIP), la patrulla motorizada y el Cuadrante 2 de Carabineros, que realizaron las primeras diligencias para detener al imputado. Tras una revisión de sus vestimentas y pertenencias, se determinó que el detenido no portaba arma de fuego, por lo que fue detenido por el delito de amenazas.
Al momento de ser trasladado hasta el Hospital Clínico de Magallanes, el imputado indicó que no era delincuente y que su acción tuvo que ver con una medida desesperada para no perder su trabajo.