FUENTE : LA PRENSA AUSTRAL
Una constancia ante la Inspección del Trabajo realizó ayer a las 11 horas el Sindicato de Trabajadores de la empresa Epark, encargada del cobro de estacionamientos controlados en la comuna, para lo cual todo su personal se congregó en las instalaciones del Instituto de Previsión Social en calle Pedro Montt.
La intención era que su empleador les cancelara el pago tardío de sus sueldos de junio, el cual hasta ese momento aún no se hacía efectivo, por lo que tampoco salieron a trabajar a primera hora de la mañana. Tras cursar este trámite ante la Inspección del Trabajo, cerca del mediodía, los dirigentes se dirigieron hasta la empresa, adonde se les informó que ya se les estaba pagando sus remuneraciones. A esa hora, el personal ya había retomado sus funciones. Esta situación había sido calificada como un problema de transferencia.
Durante la espera que hacían sus colegas en dependencias del IPS, una trabajadora de Epark sufrió un desmayo al interior del edificio, a raíz de un aparente episodio cardiaco. Pese a solicitar una ambulancia, su llegada tardó 20 minutos, por lo cual la paciente, identificada como Ximena Díaz, debió ser asistida en el intertanto por un funcionario de la Primera Comisaría de Carabineros, el suboficial mayor Francisco Sánchez.
Tras la llegada de personal paramédico del Samu, éste señaló que la joven trabajadora habría sufrido un preinfarto, desconociendo si esta persona disponía de algún historial clínico, por lo que esperaba que fuera estabilizada al llegar al centro médico. En la espera, indicó que le suministró masaje de tipo cardiaco y sobre sus brazos a la paciente, para que pudiera reaccionar, puesto que en una primera instancia tuvo una aceleración muy notoria en su corazón y en su pulso. La joven fue trasladada finalmente en una ambulancia hasta la Clínica de la Mutual de Seguridad.
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