FUENTE : LA TERCERA
Las 15 megabanderas para conmemorar los 200 años de independencia del país, fue uno de los proyectos más polémico del Bicentenario. La iniciativa, propuesta por el ex ministro de Obras Públicas, Laurence Golborne, provocó serias críticas, por la gran inversión que requería, en medio del proceso de reconstrucción post 27/F.
La iniciativa, de $ 6.000 millones, se financia con fondos sectoriales del MOP en cada región, pero ahora las actuales autoridades decidieron traspasar la misión: “Es una obra que va a depender de los gobiernos regionales y comunidades regionales, la determinación de continuar adelante o no. En algunas regiones se han instalado y en otras se ha preferido, por el monto de los recursos, ocuparlo para otras cosas”, dijo el ministro Alberto Undurraga.
En efecto, la elección fue diferente en cada una de las regiones. Según la cartera, tres ciudades decidieron no seguir con las obras: Iquique, Valdivia y Punta Arenas. La capital de Tarapacá había proyectado instalar la gran bandera en la plaza “21 de Mayo”, pero hubo demoras. Según el intendente Mitchel Cartes, “cuando llegamos el 11 de marzo, el proyecto estaba detenido. Los sismos de inicios de abril, nos obligaron a reorientar nuestras preocupaciones y recursos, donde la instalación de una bandera no es una prioridad”.
“En la Región de Los Ríos se definió descartar la licitación por la bandera. La idea es disponer de esos recursos para generar un ‘Hito Bicentenario’ que sea definido por la ciudadanía”, explicó el intendente de la XIV Región, Egon Montecinos.
En Punta Arenas, en tanto, fue el concejo municipal el que rechazó, de forma unánime y en dos ocasiones la instalación del símbolo patrio, argumentando el alto costo del proyecto ($ 400 millones).
En otras regiones, las críticas por la alta inversión aumentaron porque es “un proyecto que no tiene ningún crédito social y ninguna sintonía con la ciudadanía”, dijo el alcalde de Coyhaique, Alejandro Huala. A inicios de año el edil incluso interpuso un recurso judicial contra el proyecto en la Corte de Apelaciones de la ciudad.
En la Sexta Región, las críticas llegaron desde la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Rancagua, para quienes se trata de un proyecto “sin impacto social real”.
Hay otras regiones donde simplemente el emblema no está, pese a haber sido licitado. Como en Valparaíso, donde el intendente Ricardo Bravo, señaló: “Desconozco si la bandera está. Si ese proyecto se ejecutó, habrá que implementarlo, pero no es parte de una prioridad”.
En Talca, todavía no hay bandera, aunque la plaza Victoria será el recinto donde se emplazará, donde reemplazará a la histórica estatua que dio el nombre a la plaza. En Los Lagos también esperan ver flamear la enorme lona tricolor, pero no tiene fecha de inauguración. “Eso está por definirse, ya que aún no se sabe si va a ser o no inaugurada por este gobierno”, dijo el seremi de OO.PP., Carlos Contreras.
En cambio, también hubo grandes inauguraciones en la Región del Biobío, en la conmemoración del cuarto aniversario del 27/F.
En otras regiones sus inauguraciones pasaron desapercibidas. Es el caso de la bandera instalada en la cima del Morro de Arica, donde ya existía un emblema para recordar la Guerra del Pacífico. También, en el “tramo cero” del Parque Kaukari, en la Región de Atacama, se izó la bandera. En este caso, el proyecto consideró dos banderas, una para repuesto.
En Coquimbo, la ceremonia de izamiento de la gran bandera, que se encuentra en la cima del cerro Santa Lucía, al interior del Regimiento Coquimbo, la encabezó el Presidente Sebastián Piñera, el 27 de febrero de este año. Y en Antofagasta, el Monumento Hilo de Agua, tiene el símbolo chileno.
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