Un saco de plátanos proveniente desde Ecuador que traía a la alargada fruta rellena de pura mandanga fue incautado en España.
La cocaína llegó a la Madre Patria a través del puerto andaluz de Algeciras (Cádiz) en contenedores procedentes desde el país sudaca.
Los narcotraficantes utilizaban la fruta para transportar la droga, ya que "al tratarse de un material perecedero", les permitía beneficiarse de una "reducción de plazos en la tramitación aduanera", lo que les favorecía a la hora de mover rápidamente el estupefaciente.
"La droga estaba escondida en planchas de plástico que se adosaban al interior de las cajas de cartón que portaban las bananas", informó la policía española en un comunicado. Además, había fruta falsa que contenía la sustancia ilegal en su interior.
En la operación se logró detener a un total de 11 pericos que ahora están cantando toda la pulenta a la policía a la espera del traje a rallas que lo tendrán puesto por unos buenos años.
No es la primera vez que los narcotraficantes utilizan la importación frutícula para ocultar estupefacientes. En enero de este año, España halló en este mismo puerto 645 kilos de coca que también estaban escondidos en plátanos de Ecuador. Con la misma modalidad, los narcos intentaron ingresar 1.425 kilos de drogas a Valencia y Sevilla en abril de 2010.
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